Asegúrate de tomar mucho líquido.
Algunas mujeres embarazadas descubren que el brécol, las espinacas, la coliflor y las comidas fritas les producen gas o acidez estomacal. Tu puedes planear una dieta balanceada que evite estos alimentos. Las bebidas gaseosas también pueden causar gas o acidez estomacal a algunas mujeres, aunque otras descubren que estos alimentos ayudan a su sistema digestivo.
Estreñimiento.
Comer una dieta rica en fibras y tomar muchos fluidos pueden ayudar a
Agregue granos integrales y legumbres lentamente a su dieta. Tome más fluidos. Coma
La fibra se encuentra en gran proporción en el pan integral, las verduras crudas, los cereales, las leguminosas y las frutas (especialmente aquéllas con cáscara). La fibra solamente surte el efecto deseado en combinación con líquido. Por ello, cuando se sigue una dieta rica en fibra, es importante beber mucho líquido, incluido en el agua, jugos de frutas, leche.
Acidez.
La presión del bebé puede resultar en que fluidos estomacales se obliguen a
Náuseas.
Esto sucede frecuentemente al comienzo del embarazo. Trate de tener
Exceso de peso:
Un aumento entre 9 y 12 kg. suele considerarse adecuado en un embarazo. El sobrepeso en la embarazada se considera perjudicial tanto para la madre como para el feto.
El aumento excesivo de peso depende de la edad de la madre, su corpulencia habitual y su experiencia de maternidad además de su predisposición.
Hay que tener cuidado con los regímenes restrictivos en la embarazada obesa, ya que tienen que estar dirigidos y equilibrados.
Anemias:
Anemia ferropénica: Se produce por un déficit de hierro en el organismo materno, por eso, ésta ha de incluir en su dieta alimentos ricos en hierro y proteínas para que el nivel de hierro del niño al nacer sea suficiente y se evite una anemia.
Anemia megaloblástica: Se produce por un déficit de ácido fálico (o folacina) o vitamina B12. Los requerimientos en ácido fálico del embarazo aumentan mucho con respecto a la de un adulto.
Toxemia del embarazo: Esta complicación se caracteriza por una elevación de la presión sanguínea, albuminuria y aumento rápido de peso debido al edema. La incidencia de esta toxemia se reduce con suplementos de proteínas y vitaminas.
Hipertensión:
Los requerimientos sustanciales son los mismos que para una embarazada no hipertensa, aunque sí es necesario limitar el consumo de sal de la madre, para evitar un acumulo de sodio y la formación de edemas.
Diabetes:
Cuando la madre padece diabetes, el niño suele nacer con hiperinsulinemias acusadas y durante la vida fetal, el exceso de insulina acelera los procesos de síntesis de proteínas corporales, con lo cual estos niños nacen con mayor peso que los niños normales.
1 comentario:
Dra. Rosabell; últimamente tengo mucho sueño, y por las noches suelo despertarme y no puedo dormir hasta después de 2 ó 3 horas, y durante el día por mi actividad laboral me es difícil tomar una siesta, ¿qué puedo hacer? Se que es indispensable descansar bien y me preocupa no hacerlo
Publicar un comentario